Cuando se quiere, como yo quiero, grande es la herida por una traición,

envenenarte mis sentimientos con el pecado de tu corazón,

de mi te fuiste aventurera y hoy pecador ha regresado a mi,

ya no te quiero y he de marcharme, y estando lejos yo te olvidaré.

Cuando yo me vaya, nadie te amará, porque está manchado tu corazón.

Con el pecado, cuando yo me vaya, nadie te amará,

porque está manchado tu corazón, con el pecado.

¡Arriveder!

Cuando yo me vaya, nadie te amará, porque está manchado tu corazón,

con el pecado.

Cuando yo me vaya, nadie te amará, porque está manchado tu corazón,

con el pecado.

¡Los Rosarios otra vez!

¡Jajajaja!

¡Acabando!

¡Jajaja!

¡Bueno!

¡Bueno!

Cuando yo me vaya, nadie te amará, porque está manchado tu corazón,

con el pecado.

Cuando yo me vaya, nadie te amará, porque está manchado tu corazón,

con el pecado.

¡Ok!

Yo te llamo.