Sé que molesta saber que yo estoy más morro que no vivo de arrimado y ya tengo mi propia casa.

Sé que les arde no poder decir que no sirvo pa' nada, por eso nomás les queda criticarme.

Cuando de morro agarré el rollo que nadie me dio el apoyo, ni preguntas fueron para contestarme.

Dormí con dudas de fracaso y aunque nunca fue mi caso, la toalla sí estuve a punto de tirarle.

Y me alejé en las amistades, recorté, dejé de hablarle a medio mundo y le paré un rato al desmadre.

Me concentré en lo que quería, decreté y no digo que viva perfecto, pero sí mejor que antes.

Recuerdo la promesa que le hice a mi amante.

Una casita bien le voy a levantar y quiero que ella no trabaje.

Y al que le arda copas, Raúl Beltrán.

Que se ponga pomadita, viejón.

¡Pura legión, R.G.!

¡Oh, mono!

Tal vez por ser de familia disfuncional y no vivir igual que todos yo siempre quise buscarle

Traigo en la mente el temor a fracasar porque me gusta compararme siempre con gente más grande.

Yo no compito, me navego de lejitos, pero les tiendo la mano si en algo puedo ayudarles.

Aquí está el hombro de un hombre para el apoyo, yo me corto muy buen rollo, nada más no se recarguen.

Si soy culero es con quien así mismo fue, como se porten conmigo yo siempre voy a tratar.

No se me olvida que me sacaron la vuelta cuando no traía ni un cinco y tampoco quería robarles.

Las cosas cambian para que sepan nomás, y aunque me vayan hasta la casa a buscar no creo que vayan a encontrarme.