Una niña triste en el espejo
Me mira prudente y no quiere hablar
Hay un monstruo gris en la cocina
Que lo rompe todo, que no para de gritar
Tengo una mano en el cuello
Que con sutileza me impide respirar
Una venda me tapa los ojos
Puedo oler el miedo y se acerca
Tengo un nudo en las cuerdas
Que ensucia mi voz al cantar
Tengo una culpa que me aprieta
Se posa en mis hombros y me cuesta andar
Pero dibujé
Una puerta violeta en la pared
Y al entrar me liberé
Como se despliega la vela de una barco
Desperté
En un prado verde muy lejos de aquí
Corrí, grité, reí Sé lo que no quiero
ahora estoy a salvo
Una flor que se marchita
Un árbol que no crece
porque no es su lugar
Un castigo que se me impone
Un verso que me tacha y me anula
Tengo todo el cuerpo encadenado
Las manos agrietadas,
mil arrugas en la piel
Las fantasmas hablan en la nuca
Se reabre la herida y me sangra
Hay un jilguero en mi
garganta
Que vuela con fuerza
Tengo la
necesidad de girar la llave
Y no mirar atrás
Así que dibujé
Una puerta violeta
en la pared
Y al entrar me liberé
Como se
despliega la vela de una barco
Desperté
En un prado verde muy lejos de aquí
Corrí, grité, reí
Sé lo que no quiero
ahora estoy a salvo
Así que dibujé
Una puerta violeta en la pared
Y al entrar me liberé
Como se despliega la vela de un barco
Aparecí
En un prado verde
muy lejos de aquí
Corrí, grité, reí
Sé lo que no quiero
ahora estoy a salvo