Pasan los días, pasan las horas, el tiempo pasa y no perdona.
Esta es mi jungla, Barcelona. Nada es gratis, así funciona.
Todo es genial si la bolsa suena. Hace tiempo ya que entramos en escena.
Esos días eran estudias o diseñas. Todas son modernas, sudo de sapeñas.
Si no es por las rimas estaría en la mierda, pero estoy desayunando entre tus piernas.
Soy de letras y llevo las cuentas y no me importan las apariencias.
Sigo a mi cadencia, no entro en deca. Siempre seré el jefe desde los novetas.
Soy la zorra que lleva las riendas y tú la mujer a la que le sobran prendas.
Izquierda, derecha diciendo up. Pananana, panananana.
Manos en el aire, adelante y atrás. Pananana, panananana.
Tráelo aquí, Comás. Tráelo aquí, Comás. Tráelo aquí, Comás. Tráelo aquí.
Hago lo que hago aunque me arrepienta. Y lo que hago peta como una mascleta.
Todos los veranos en IBZ. No llevas frenos en esa bicicleta.
A esa pared le están saliendo grietas y estoy rodeado de mamis pretas.
Pero no ha venido ni Romeo, ni Julieta, ni Ferrán.
Adria sigo teniendo la receta. Construyo las frases de cuatro en cuatro.
Y llegué directamente del establo a Calacio. Más de 27 letras en el abecedario.
Y un par de ventanas con vistas al ojopatio. Sobre el escenario un micrófono enalámbrico.
Un esclavo del ritmo donde mandan los vatios. Cooking Bananas tiene nuevo álbum.
No voy a dejarte con la miel en los labios.
Izquierda a derecha diciendo.
Pananana, panananana.
Manos en el aire, adelante y atrás.
Pananana, pananananana.
Tráelo aquí, Comás.
Tráelo aquí, Comás.
Tráelo aquí, Comás.
Tráelo aquí.