Cuando el sol se oculta cada tarde en mi recuerdo
Tu presencia me parece realidad.
Es un espejismo el creerte todavía.
En mi infancia devolviéndome la paz.
Hace tanto tiempo que te fuiste de esta vida
Que parece que enloquezco si no estás.
Veo tu figura que me mira de repente, es mentira,
Ya no existes, no es verdad.
Lamento que ahora escuchas desde el cielo
Dime madre, cuando quieras voy a verte.
Lamento que me sale de la pena.
De sentirte cerca y lejos sin tenerte.
Esas manos blancas que rozaban mis mejillas
Se quedaron dibujadas en mi faz.
Esos ojos tuyos que miraban las estrellas
Han perdido ya su luz, su libertad.
Lamento que ahora escuchas desde el cielo
Dime madre, cuando quieras voy a verte
Lamento que me sale de la pena.
De sentirte cerca y lejos sin tenerte.
Lamento que me sale de la pena.
De sentirte cerca y lejos sin tenerte.