Nada.
No sé qué está pasando, que todo es tan leve que es.
Que tú ya no me besas tal como ayer.
Ya no sé en la playa.
No me dejas de amarte, algo entre nosotros no va bien.
No culpes a la noche, no culpes a la playa.
No culpes a la lluvia, será que no vea más.
Ay, no culpes a la noche.
No culpes a la magia No culpes a la lluvia De verdad que no me amas
No busques más disculpas, no siento tus caricias.
Ya no eres la misma que yo a veces te veo tan distante
Te siento tan distinta.
Pues hay dentro de ti otra mujer.
No culpes a la noche, no culpes a la magia.
No culpes a la lluvia, será que no me ama.
Ay, no culpes a la noche.
No culpes a la playa, no culpes a la lluvia, será que no me amas.
Ya no sé, ya no sé Ya no sé qué va a pasar Ya no sé
Ya no sé, ya no sé qué voy a hacer.
Ya no sé, no, no, no, ya no sé.
Ya no sé qué va a pasar, ya no sé, ya no sé.
Ya no sé qué voy a hacer.
No nos culpes a la lluvia Será que no me amas No culpes a la noche
No culpes a la raya No culpes a la lluvia
¿Será que no me aman?
China, sé que no me amas, no inventes más.
No culpes a la noche, ni a la playa, ni a la lluvia.
Y acepta que no me amas más.
China, sé que no me amas, no inventes más.
Oye, China.
No inventes más conmigo y si no me quieres, echa falla, echa falla.
Si nace que no me amas, no inventes más.
Amor, amor, amor, amor, es un algo sin nombre que ilusiona al hombre por una mujer.
¡Eso!
Dicha paya.
¡Woo!
¡Vamos!
¡Vamos!
¡Vamos!
A que se rompa el...
¡A la yo!
Fíjate Camila, no puedo más con tus mentiras.
No puedo, no puedo, no puedo seguir escuchando todas tus mentiras.
Yo puedo más con tus mentiras.
Y es que tú eres tan bonita.
Ay, pero mentirosa.
Fíjate, Camila, no puedo más con tus mentiras.
Yo sé, yo sé, yo sé que amas tanto.
Y ahora dice otra cosa.
Otra cosa.
Pero que mentirosa.
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Tú me robaste la calma, me robaste la juventud, y yo que a todos les decía que no hay ninguna como tú.
Pero tú me abandonaste y mi vida perdió su luz.
Perdió su luz.
Con Izúcar estamos gozando.
