(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús)
(Jesús) María
(María)
(María)
(María) Uh
(María)
(María)
(María)
(María)
(María)
(María) Vamos ahora
(María)
A ver si me entendieron lo que voy a decir ahorita
Todo lo anterior
Todo lo antertior, fue introducción
Vamos al tema
Una canción de esas que salen de la manga
En el sentido de que no siempre las cantmos
Porque pertenecen a una intimidad
Post-concierto, antes del concierto
¡Caramba!, es hermoso servirle a Dios en lo que uno hace
Pero es más hermoso saber que ese Dios al que le sirves es tu amigo
Te quiere mucho y entiende, aún, tu silencio
¿Cuántas veces no hemos llegado usted y yo
A cantarle a Dios, textualmente así?
O a decirle algo, Señor, y cuando dices el Señor, dice
¡Ay hijo!, ¿Y ahora qué le digo?
Él entiende, aunque falten las palabras
Esta canción es una canción íntima
Una canción que nació, hace ya unos ocho años, allá en Chiuaua
En un momento de mucha soledad, de mucha tristeza
Pero de mucha presencia de Dios
David dice en el Salmo 23:
"Aunque pase por el valle oscuro
Tu vara y tu cayado me infunden en el aliento
Me confortan"
No dice que ve el pastor
Pero por lo menos ve la vara, que es la correción
Y el callado que es la dirección
Esta canción es para los que se la saben
Que se agasajen con nosotros y la cantemos
Y para el que no, que se la aprenda
Hay una parte divina donde dice:
"Pues solo a ti te tengo
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad"
Piensa para cantarla
Piensa para colocarte en el corazón de ella
Vamos entrando, de a poquito
Dice así
Si te la sabes
Házme un favor, solo cántala conmigo
Aún en la tormenta
Aún aunque arrece el mar
Te alabo, te alabo en verdad
Aún lejos de los míos
Aún en mi soledad
Te alabo, te alabo en verdad
Sólo a ti tengo
Tú eres mi heredad
¿Se lo decimos?
Pues sólo a ti te tengo
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad
Sólo a ti te tengo, díselo
Pues sólo a ti te tengo
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad
Esa parte es nueva, cántala con nosotros, otra vez
Ahora aprovéchate, acércate
¿Qué creen?
¿Qué hay que esperar al final del concierto para hablar con Dios?
Todo es hablar con Dios
Sé tú mismo, sé sincero
Y como aquel joven, en la palabra que le dijo el señor Daniel
Desde la primera vez que intentaste hablarme, yo te escuché
Yo cuando estaba haciendo esta canción me acordé de su frase:
"Hay que adorarlo en espíritu"
Y en verdad dije: "Señor, pues aquí estoy en espíritu y, la verdad
También la traigo y es lo que puedo hacer"
Me acuerdo que le dije: "No sé alabarte, no sé hablarte"
Pero aquí vengo a hacerlo, vengo a intentarlo
Porque tú oyes sin peros
Aún sin muchas palabras
¡Ánimo!
En nombre de toda América latina
¿Lo cantamos?
Aún sin muchas palabras
Aún aunque no sé alabar
Te alabo, te alabo en verdad
Otra vez, aún sin muchas palabras, sé tú mismo y acércate
Aún sin muchas palabras
Aunque no sé alabar
Aún aunque no sé alabar (Te alabo, te alabo en verdad)
Te alabo, (Bien) te alabo en verdad (Solo a ti te tengo, díselo)
Pues sólo a ti te tengo (Tú eres mi heredad)
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad
Otra vez, solo a ti te tengo, díselo
Pues solo a ti te tengo
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad
Canta, sin miedo, canta, cántaselo
Solo a ti tengo, tú eres mi heredad
Se lo vamos a cantar: solo a ti te tengo, tú eres mi heredad
La vida sea, el Señor es mi pastor
Nada me falta, rico no es el que tiene más
Rico es el que menos necesita
Dichosos ustedes que puedan cantar esto conmigo ahora
Nos faltará, siempre nos faltará algo
Pero mientras lo tengamos a él, entonces no falta nada
Porque él es la raíz de dentro, lo que llena campletamente
¡Ánimo!
Solo a ti te tengo
Pues sólo a ti te tengo (Tú eres mi heredad)
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad
Última, fuerte, con tu corazón
Pues sólo a ti te tengo (Pues sólo a ti te tengo)
Pues tú eres mi heredad
Te alabo, te alabo en verdad
¿Cantas con nosotros?
