Le piso fondal a ambos sin miedo, me gustó el refuego

Los lujos que me calco no cualquiera son de colección.

Agradezco a mi madre Se le extraña a mi padre

Nunca tiré la toalla, huevos sobraron para llegar

La gente no más habla, todas se me resbalan.

No cualquiera me llega aquí, primero hay que saber tratar.

Los sueños sí se pueden cumplir, los pasos de los grandes seguí.

Y hoy con mucho orgullo todo lo que tengo ha sido por mí.

La fuerza.

Y su compa, Miguel Cornejo.

Y nomás para que quede claro, oiga, que también las mujeres pueden.

Y es lo que hay, viejo.

Tres hijas que protejo, por ellas no le voy a bajar

Cada raya marcada tiene su valor sentimental.

Fui muy discriminada Ahora soy la que manda

En mi empresa no faltes el respeto a ninguna mujer.

Andamos en la mira.

Pero eso no me quita las ganas de jalarle si un cabrón se llegara a pasar.

Rolex de loco y diamantes caros, por berrigo chilo que me cargo.

De gracias a San Judas por no defraudarme y cuidarme en todo lo que hago.