Natalia se pierde en sus ojos de mar 
Su voz que la sabe tocar 
Lo ve y se estremece 
Y a los diecisiete 
Se asoma su fragilidad 
Natalia maquilla su piel de rosal 
Teñida de púrpura y sal 
Y espera en las tardes 
Con gozo culpable 
Los juegos de guerra y de paz 
Y llora 
Porque le tuvo fe 
Y llora 
Porque no puede con él 
Y va Natalia 
Dejando escarchas de piel 
Herida del alma 
Soltando en su almohada 
Los sueños que empiezan a arder 
  Natalia cansada de amar y perder 
Le pide al arcángel Miguel 
Que corte las vendas 
De aquella fe ciega 
Que le hacen volver a caer 
Y llora 
Porque le tuvo fe 
Y llora 
Porque no puede con él 
Y va Natalia 
Dejando escarchas de piel 
Herida del alma 
Soltando en su almohada 
Los sueños que empiezan a arder 
  Y llora 
Porque le tuvo fe 
Y llora 
Porque no puede con él 
Y va Natalia 
Dejando escarchas de piel 
Herida del alma 
Soltando en su almohada 
Los sueños que empiezan a arder 
Herida del alma 
Soltando en su almohada 
Los sueños que empiezan a arder 
Los sueños que empiezan a arder